Una decisión clave: vivir en Andorra como emprendedor
Decidir mudarse a Andorra como emprendedor supone iniciar un proyecto personal y profesional en un entorno único. El país es un principado pequeño entre España y Francia, con tan solo 468 km², pero su ecosistema fiscal y natural lo convierten en la opción ideal para quienes quieren emprender en Europa.
Decidí mudarme a Andorra hace unos años, pero es cierto que no lo materialicé hasta hace más o menos un año.
Andorra siempre me había atraído, ya no solo por su sistema fiscal, sino por el estilo de vida del país: su seguridad, el ambiente entre emprendedores en el país, la nieve y el esquí…en fin, Andorra tiene bastantes atractivos si te pones a pensar.
Ventajas fiscales y calidad de vida
La principal razón para muchos emprendedores es el sistema impositivo. El impuesto sobre la renta (IRPF) tiene un tipo máximo del 10%, mientras que el impuesto de sociedades también se mantiene en ese nivel. No existe impuesto sobre el patrimonio ni sucesiones, lo que resulta muy beneficioso para empresarios, inversores y las empresas en andorra.
De forma resumida, tus impuestos nunca superarán el 10% en Andorra. Lo que comparado con otros países como por ejemplo España, es una maravilla. Eso, debo decir, influye a cualquiera a crear una empresa en Andorra.
Tipos de residencia y requisitos
Existen dos formas principales de obtener residencia:
- Residencia activa: para quienes desean trabajar o crear una empresa, ya sea mediante un contrato o como autónomos.
- Residencia pasiva: para inversores o emprendedores sin cuenta propia, que demuestren solvencia económica (aproximadamente 300 % del salario mínimo).
Para la residencia activa, se requiere pasar al menos 183 días al año en Andorra. Y para la residencia pasiva, se exige pasar al menos 90 días en el país y contar con seguro médico privado, antecedentes penales certificados y un lugar de residencia.
Pero ten en cuenta, que si eres emprendedor o empresario, tu residencia tiene que ser la residencia activa por cuenta propia. No dejes que te mareen en gestorías que te venden entrar en el país como trabajador y crear una empresa en Andorra al año para evitarte pagar los 50K€. Eso está muy perseguido en el país y si bien tendrás la residencia, a la hora de renovar tendrás muchos problemas y te aseguro que hacer las cosas bien, sí tiene precio.
Proceso de solicitud paso a paso
El proceso varía según el tipo de permiso, aunque suele comenzar con la presentación de la solicitud correspondiente online o presencial. Te recomiendo que lo hagas de manera personal, ya que de forma online, parece que se pierden muchos formularios. Para residencia pasiva puede tardar alrededor de una semana; para la activa, como va supeditada a crear la empresa en Andorra, suele tardar entre dos y dos meses y medio. Entre los trámites están:
- Obtener certificado de antecedentes apostillado del país de nacionalidad y del país de residencia.
- Contratar seguro médico en función de la residencia en Andorra.
- Demostrar medios económicos o contrato/actividad, en función de la residencia en Andorra.
- Presentar solicitud en el registro mercantil si se crea empresa.
- Importante: Apostilla y/o legaliza los documentos extranjeros.
Crear una empresa en Andorra
Para crear una empresa, se necesita capital social normalmente entre 3.000 € y 60.000 € según estructura y un plan claro del negocio.
Para crear una empresa en Andorra, el proceso no es ágil: se inscribe en el registro mercantil y se solicita el permiso correspondiente. La imposición es baja: 10 % en sociedades, sin gravámenes adicionales.
Ten en cuenta que si sois varios socios, será muy importante hacer un pacto de socios antes de constituir la empresa en Andorra o bien justo después, antes de empezar a trabajar con la empresa.
Montañas, actividad al aire libre y seguridad
Vivir en Andorra también significa disfrutar de un entorno natural privilegiado. Un 90 % del territorio es montaña, ideal para esquí, senderismo o ciclismo.
Además, el principado es considerado uno de los países más seguros del mundo, con índices de criminalidad mínimos.
Todo eso lleva a que muchos queramos solicitar el permiso de residencia en Andorra para poder disfrutar de estas maravillas.
Calidad de vida y servicios
La calidad de vida es alta: sistema sanitario de primer nivel, múltiples opciones educativas (andorrano, español, francés e incluso Bachillerato internacional) y estabilidad política. La esperanza de vida roza los 85 años, y el desempleo es muy bajo, alrededor del 1.7 %
Aquí tienes más información sobre el estilo de vida en Andorra. El Principado de Andorra se ha vuelto uno de los principales targets de muchos empresarios y emprendedores, precisamente por lo bien que se vive en este país.
Residencia para nómadas digitales
Andorra ha adaptado su régimen a la era del teletrabajo. El visado para nómadas digitales permite residir sin trabajar localmente siempre que se demuestre actividad y solvencia. Dispone de fibra óptica en todo el territorio y una comunidad creciente de freelancers.
No obstante, este permiso de residencia es muy difícil de obtener, dado que se debe aprobar previamente por el departamento del Gobierno correspondiente. Debes demostrar que eres de interés para el país, lo que es sumamente complicado obtener este permiso teniendo en cuenta estos requisitos.
No obstante, la residencia por cuenta propia, no requiere estos requisitos tan difíciles y cumpliendo básicamente los requisitos económicos puedes obtener la residencia.
Ahora bien, no todo es perfecto: el coste de vivienda puede ser alto, especialmente en la capital o Escaldes.
Para quienes trabajan desde casa, puede ser mejor buscar en Ordino o Canillo, más tranquilos y con precios algo más bajos . Asimismo, integrarse requiere cierto nivel de catalán (A2) para aquellas profesiones liberales, es decir, los que para su sociedad no necesitan aportar los 50K€. Este es un proyecto diferente de residencia en Andorra.
Experiencia de mi primer año
Mi primer año como emprendedor en Andorra fue exigente pero gratificante.
Tras obtener la residencia activa y crear mi empresa en Andorra, pasé por el proceso de inmigración, apertura de cuenta bancaria, trámites fiscales y administrativos.
Gracias a la baja fiscalidad, pude reinvertir más en mi negocio. Logré crear una sociedad pequeña con un capital social inicial de 3.000 €, y la apertura de una cuenta bancaria fue rápida tras pasar controles del KYC.
Sigo con mi sociedad y creando cada vez más negocio dado el hub de emprendedores que existe en el país y al que tengo acceso gracias a ser residente andorrano.
Sociedad y cultura local
Andorranos y residentes forman una sociedad multicultural donde conviven catalán, español, inglés y francés. Existen eventos culturales durante todo el año, incluidos festivales de jazz y actividades tradicionales.
A pesar de lo pequeño que es Andorra, comparado con otros países como Francia o España, en Andorra no te aburres, en este caso, se llevan a cabo eventos casi cada fin de semana, ya sean culturales o profesionales relacionados con el mundo del emprendimiento.
Es por eso que ser residente andorrano implica mucho más que beneficios fiscales o una buena inversión, en mi caso, además de mejorar mi negocio, encuentro muy interesando formar parte de este país.
Impuestos y obligaciones fiscales
Para mantener la residencia fiscal, es necesario permanecer al menos 183 días y presentar declaraciones de renta y el impuesto de sociedades.
Las tasas son bajas, pero se exige una gestión rigurosa para evitar sanciones.
Trámites de continuación y renovaciones
La renovación del permiso se hace cada dos años inicialmente, pasando después a periodos de tres y diez años. Para la residencia pasiva, también es necesario renovar y seguir demostrando solvencia y cumplimiento de días.
Reflexión final y recomendaciones
Vivir en Andorra es una excelente opción para emprendedores, inversores o profesionales que buscan tributar menos sin sacrificar calidad de vida.
El país ofrece un entorno fiscal atractivo, un sistema estable y un estilo de vida activo en contacto con la naturaleza. Aun así, requiere adaptarse a idiomas, integración y costes de vivienda.